La necesidad de comunicar está motivada sobre todo por la necesidad de transmitir información y recibirla. Internet permite la difusión de información, cada vez más rápida y eficaz. Mientras que en 2002 unos 677 millones de personas en todo el mundo utilizaban Internet, en 2017 ya eran 3.600 millones de personas.
El factor decisivo para este desarrollo fue y es que los contenidos de Internet son importantes para casi todos los ámbitos de la vida de las personas, ya sea para el desarrollo personal o para la vida profesional cotidiana. Internet permite las más diversas formas de comunicación en la convivencia social. Esto requiere un cierto know-how para realizar los procesos de comunicación de forma responsable y orientada a los objetivos.
El amplio campo de la comunicación digital permite las más diversas formas de comunicación, supera el tiempo y el espacio y también plantea ciertos retos a sus usuarios. Las posibilidades de comunicación a través de las redes sociales y los servicios de mensajería han adquirido una importancia creciente en los últimos años.
Los servicios de mensajería instantánea se han convertido en uno de los medios de comunicación más importantes del mundo. El importante aumento de usuarios, apoyado por el uso generalizado de los teléfonos inteligentes, ha dado un giro completo al comportamiento comunicativo de las personas en el siglo XXI. Los servicios de mensajería se han convertido en una parte indispensable de nuestra vida cotidiana, tanto en el ámbito privado como en la comunicación profesional. Nunca ha sido tan fácil llegar a tantos grupos de población a tan gran escala como ahora.
Por muy útiles y beneficiosos que sean estos medios de comunicación, también suponen un riesgo para la sociedad. En particular, el ciberacoso y la incitación al odio se están convirtiendo cada vez más en el centro del debate público. Las reglas de netiqueta y chatiquette tienen que replantearse constantemente y adaptarse a los innovadores medios de comunicación.
Los canales de las redes sociales son los nuevos impulsores de la distribución de contenidos. Hoy en día, todo el mundo puede producir sus propios contenidos y distribuirlos inmediatamente. Ya sea a través del propio sitio web o de las plataformas de medios sociales, por ejemplo, a través de su propio canal de YouTube. Estas herramientas digitales se utilizan principalmente en un contexto profesional para trabajar juntos. ¿Colaborar con los demás nunca ha sido tan fácil?
El Módulo «Comunicación y Colaboración» del proyecto CUMILA se centra en estos aspectos.
Para dar a conocer CUMILA a un público más amplio, presentamos el proyecto en detalle en una presentación en línea. Conozca mejor los componentes individuales de CUMILA y aprenda cómo puede utilizar CUMILA usted mismo.
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